Mundo Padres

miércoles, 24 de noviembre de 2010

jueves, 18 de noviembre de 2010

La Adolescencia en la Sociedad Actual. Parte 2 Responsabilidad y Misión de los Padres.

Los padres deben enfrentar el desafío de reconocer y desplegar sus propias capacidades, valores y creencias para educar y acompañar a sus hijos en el transito por esta etapa.
Es probable que se sientan solos, agobiados por sus temores y dudas; muchas veces desconcertados por las dificultades que se les presentan en el camino; por las malas noticias que se reciben  en los informativos de TV y en los Diarios y Revistas.
Como alternativa, en su afán por cuidarlos, llegan a creer que no dejarlos salir para que no se expongan en demasía, es la solución más acertada. Nada más erróneo, puesto que esto dará efectos contrarios en las actitudes de sus hijos.


Considero que, los hijos deben vivir sus experiencias, probar su fortaleza interna, aprender de los errores, saber cuidarse y no dejarse tentar por lo que no les parece bueno para ellos. Obviamente que antes debemos otorgarles herramientas apropiadas y modelar sus espíritu para no largarlos al mundo sin defensas.

Para ello es indispensable en esta etapa apoyarse en 3 pilares fundamentales:

1. Transmisión de Valores.
Los padres deben ser coherentes y firmes en sus convicciones porque la difusión es a través de la palabra y del buen ejemplo. Los valores morales como la tolerancia, el respeto, la honestidad, la responsabilidad, la lealtad, el trabajo, es enseñado en el seno de la familia a través de una sana relación entre los miembros que la compone y posibilitado por la comunicación fluida entre ellos.
La incorporación de estos valores en el joven los ayudará a insertarse eficaz y productivamente en la sociedad actual. Así podrá descubrir otros valores como la solidaridad, la libertad personal y de los otros, elegirá la paz en vez de la guerra, el respeto al hombre, la cooperación y comprensión, entre otros.
De este modo, le brindaremos herramientas útiles para su vida y es muy poco probable que elija el camino de la autodestrucción y se identifique con patrones que no lo lleven a ningún lado.

2. Comunicación clara en la puesta de límites.
Los padres deben ser responsables y confiar en sus propias capacidades (en sus virtudes y fortalezas) para discernir y evaluar las situaciones, usando un criterio apto, para poder decir Si o No, según corresponda.
A los hijos hay que enseñarles que no da lo mismo hacer las cosas bien, que hacer las cosas mal, que la elección por una u otra conlleva consecuencias a asumir. También ellos deben comprender que no todo tienen permitido, que hay cosas que aùn no pueden hacer.
Por supuesto que optar por ser permisivo es el camino más fácil para los progenitores, los librará de profundos dolores de cabeza, les ahorrará tiempo y esfuerzo, aunque no se les garantizará buenos resultados en la crianza.

3. Promover  la comunicación.
Será el deber de los padres facilitar y promover el dialogo con sus hijos, ello contribuirá a reforzar los lazos entre los miembros, a generar un clima de unión, respeto y seguridad.

Es muy importante que los Padres puedan:

• Infundir entusiasmo ante las distintas situaciones que les toque vivir. En cualquiera de sus formas y a través de distintos mensajes deben inculcar que la vida vale la pena ser vivida.

• Fomentar la confianza en si mismo; un joven seguro decide correctamente y no se deja influenciar fácilmente.

• Propiciar un espíritu emprendedor y de lucha, inducirlos a realizar actividades y a no dejarse vencer por cualquier impedimento que se les presente en el camino.

• Alentarlos en la búsqueda constante hacia el cumplimiento de los sueños y proyectos ideados. Un joven con sueños y proyectos, es un ser sano y vital.

Obviamente que esto conlleva una dosis máxima de persistencia, tolerancia, paciencia, atención y dedicación por parte de los padres, quienes deben ser pioneros, propulsores, facilitadores y guías.
Un hijo contenido, que se sienta, escuchado, valorado y respetado y amado, seguramente va a transitar el paso a la adultez de un modo ejemplar.

Sugerencias:

 Los padres deben compartir sus miedos, dudas y experiencias con otros padres.

 Acudir a un especialista en Adolescencia, en el caso de sentir que la situación lo supere.

 Asistir a talleres o grupos de reflexión donde se trabajen distintas problemáticas actuales.

 Intentar conectarse con su historia personal, tratar de recordar las vivencias y pensamientos y actitudes de esa etapa para poder comprender un poco al adolescente y sus vicisitudes
.
PERSISTIR, INSISTIR, RESISTIR Y NUNCA DESISTIR

lunes, 8 de noviembre de 2010

La Adolescencia en medio de la Sociedad Actual. Parte 1

La adolescencia es una etapa fascinante, maravillosa aunque compleja en varios aspectos.
El incipiente joven tiene varios frentes a los que atender:
1. Cambios internos: Físicos y biológicos en su cuerpo, el resurgimiento de la libido, entre otros. Lo notarás porque a ella le nacerá el vello en el pubis y en las axilas, le crecerán los senos, y prontamente se hará mujer (menarca) al tener la capacidad de procrear. A él le crecerá el vello en el rostro y en el cuerpo, le cambiará el tono de su voz, sus genitales sufrirán modificaciones al igual que su cuerpo en tamaño y altura.
En cuanto a su libido a flor de piel, es momento del redescubrimiento de su propio cuerpo, es habitual la conquista desenfrenada hacia el otro sexo o por el contrario inhibición y timidez frente al otro, son dos caras de la misma etapa. Surgen los primeros amores, las primeras experiencias sexuales.
Los medios de comunicación como la tele, las revistas y las páginas de Internet serán su canal de consulta en donde estará depositado el Ideal a imitar o alcanzar.

2. Cambios comportamentales: Como consecuencia de los cambios internos, observarás en ellos: inestabilidad emocional; vulnerabilidad psíquica; ensimismamiento, inseguridad, desalineo en cuanto la higiene personal y con sus pertenencias, torpezas físicas, aumento o pérdida notable en su apetito; Alegría y euforia vs. Apatía y futilidad hacia las actividades cotidianas.

3. El afianzamiento de una identidad propia y el establecimiento de nuevas relaciones en su entorno: Se efectúan en medio de una realidad que les resulta difícil de asimilar.

La constitución definitiva de la identidad es en la interacción con otros, inmersa en la sociedad actual, con sus complejidades, con sus peligros, sus contradicciones, sus posibilidades, sus vicios, sus tentaciones, sus atractivos.
Hoy los jóvenes están bombardeados por estímulos y modelos a imitar o adquirir. Los mismos son de una variada gama de posibilidades productivas y no tanto: deportivas, científicas, culturales, provenientes de los medios de comunicación y de su entorno inmediato.

El modo de contacto es a través de pantallas de todo tipo y color: basta mirar alrededor y verás jóvenes siempre conectados, por medio de mensajes de texto, de teléfonos celulares, comunicándose por medio de las redes sociales en boga, exponiéndose a través de fotos, utilizando identidades ajenas o inventadas, visitando páginas de su interés por Internet y embobados en programas de TV y sumergidos en diversos realities.
Por su parte, en el armado definitivo de su identidad, el joven buscará modelos nuevos a los cuales identificarse. Puede que necesiten primero diferenciarse de sus padres, confrontando con los valores, rechazando los límites y rebelándose con todo adulto que detente la autoridad.
Es el tiempo de abrir el abanico de amistades, de armar nuevos grupos de pertenencia; de ir en la búsqueda de nuevas tendencias, en las que se imponen modas, se comparten códigos comunes y con lenguajes propios.
Pertenecer a un grupo para ellos es fundamental, los sostiene en la identificación, los contiene y les da una sensación de seguridad, de sostén en medio de su confusa sensación interna.
A nivel del entorno inmediato, por ejemplo, para salir a bailar, los hábitos sean vestir de un determinado modo, realizar antes una previa, donde se reúnen en una casa, en la puerta de un kiosco, en la esquina de un barrio y comienzan a tomar alcohol y en el peor de los casos de mala calidad…En la disco, se impone, la jarra loca, mezcla de restos de botellas y tragos, un rejunte de residuos alcohólicos y en ciertos casos, se agregar pastillitas estimulantes. Por otro lado, las pastillas (anfetaminas) son de fácil acceso para todos, al igual que la marihuana el paco y la cocaína; no olvidemos que los dillers (proveedores) están a la pesca, (en la puerta de los colegios, de los boliches de moda) de consumidores cautivos, ingenuos y ávidos seres que intentan probar nuevas sensaciones.
En algunos casos, para pertenecer y sentirse aceptado por determinado grupo o amistad sea una condición necesaria probar o consumir algún tipo de sustancia, aunque más no sea para no sentirse marginado o descalificado.


El joven desea destacarse, sobresalir, distinguirse y sobre todas las cosas llamar la atención de los demás. Puede que a través de probar estas sustancias se sienta libre, extraño, distinto, con una identidad aparente, que le permita atravesar barreras sociales y personales, que claramente, sin la ayuda de estas sustancias no lo lograría.
Me pregunto:
• ¿Este es el modo que estos chicos encuentran para mediatizar el contacto con el otro?
• ¿Cuales serán los vericuetos del Ideal para ellos?
• ¿Cómo adultos, que herramientas podemos brindarles en el transito por esta etapa?
• ¿Qué responsabilidad le compete a los padres en estas elecciones?